Visita corta
Otra vez pensando en lanzarme, siento cómo los huesos croan y la carne toma calor, la boca seca intenta alertar de que no hay vuelta atrás, en el rincón, una mirada de un ser peculiarmente sobrio, juzga el repetido pero mejorado contexto. Aparecen los recuerdos, las personas, las palabras; los motivos y la pereza borran todo, nada es más fuerte que no sentirse fuerte. Aparecen las ideas, los efectos secundarios, las conciencias; la ansiedad y la ilusión lo borran todo, nada es más débil que la vejez. Otra vez llegando temprano, no hay paredes calientes, no hay pisos sucios, no hay olores que tapar. Otra vez yéndome en sigilo, otra vez pensando en el camino que lo mejor hubiese sido no saltar, no habrá próxima vez, me lo digo una vez más, una visita corta, tiempo para olvidar.
- Escrito en enero de 2024